sábado, 20 de agosto de 2011
briznas (20)
En uno de los Jatakas (historias sobre anteriores encarnaciones del Buddha histórico), se cuenta que el Despierto se reencarnó en un perro para salvar a los perros vagabundos que estaban siendo exterminados por un rey indio.
Un gesto muy osado, porque en la India el perro es un animal impuro. Si uno de ellos traspasa el umbral de un hogar hay que limpiarlo todo a fondo, hay que purificar el hogar "mancillado".
El Buddha-perro está a punto de morir varias veces, ha de hacerse invisible para evitar las piedras, y por último convence al rey para que deponga su cruel actitud.
Este gesto compasivo me conmueve. No importa que sea una leyenda. Ahí está la esencia del budismo.
No imagino al Dios de los Desiertos, a la Voz del Libro, haciendo algo así
(el Buddha -literalmente, "el Despierto"- no es un dios, claro; es un hombre, y también es perro, buey, ave...)
Sí, es conmovedor. Gracias por esta historia. Otro abrazo
ResponderEliminarVerónica
Es precioso lo que cuentas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Si, sea verdad o no, sólo logra conmover hasta el temblor.
ResponderEliminarGracias por apreciar esta maravillosa historia,
ResponderEliminarun abrazo a todos
un dios que ama tanto a los animales que se encarna en uno de ellos para salvarlos y a su vez salvar a la humanidad de su crueldad!!
ResponderEliminarpreciosa historia, Querido Stalker!
abrazos,
anamarìa