domingo, 28 de junio de 2009
Un soplo de vida. Clarice Lispector
Esto no es una lamentación, es el grito de un ave de rapiña. Irisada e inquieta. Un beso en la cara muerta.
Escribo como si fuese a salvar la vida de alguien. Probablemente mi propia vida. Vivir es una especie de locura que la muerte comete. Porque en ellos vivimos, vivan los muertos.
De repente las cosas no tienen por qué tener sentido. Me satisfago en ser. ¿Tú eres? Estoy seguro de que sí. El sinsentido de las cosas me provoca una sonrisa de complacencia. Todo, sin duda, debe de estar siendo lo que es.
Hoy es un día de nada. Hoy es hora cero. ¿Existe por casualidad un número que no sea nada? ¿Qué es menos que cero? ¿Qué comienza en lo que nunca ha comenzado porque siempre era?, y ¿era antes de siempre? Me adhiero a esta ausencia vital y rejuvenezco por entero, al mismo tiempo contenido y total. Redondo sin principio ni fin, soy el punto antes del cero y del punto final. Pero al mismo tiempo todo es tan fugaz. Siempre fui e inmediatamente dejaba de ser. El día transcurre a su aire y hay abismos de silencio en mí. La sombra de mi alma es el cuerpo. El cuerpo es la sombra de mi alma. Este libro es la sombra de mí. Pido la venia para pasar. Me siento culpable cuando no os obedezco. Soy feliz a deshora. Infeliz cuando todos bailan. Me dijeron que los lisiados se regocijan y también me dijeron que los ciegos se alegran.
Nunca la vida ha sido tan actual como hoy; por un tris no es el futuro. El tiempo para mí significa disgregación de la materia. La putrefacción de lo orgánico, como si el tiempo fuese un gusano dentro de un fruto y le robase al fruto toda su pulpa. El tiempo no existe. Lo que llamamos tiempo es el movimiento de evolución de las cosas, pero el tiempo en sí no existe. O existe inmutable y en él nos trasladamos. El tiempo pasa demasiado deprisa y la vida es tan corta. Entonces cultivo una especie de tedio. Saboreo así cada detestable minuto. Quiero multiplicarme para poder abarcar incluso las áreas desérticas que dan idea de inmovilidad eterna. En la eternidad no existe el tiempo. Noche y día son contrarios porque son el tiempo y el tiempo no se divide. De ahora en adelante el tiempo será siempre actual. Hoy es hoy. Me sorprendo y al mismo tiempo desconfío de tanto que me es dado. Y mañana tendré de nuevo un hoy. Hay algo doloroso y tajante en vivir el hoy. El paroxismo de la nota más fina y alta de un violín insistente. Pero está el hábito y el hábito anestesia. El aguijón de la abeja del día floreciente de hoy. Gracias a Dios, tengo qué comer. El pan nuestro de cada día.
Querría escribir un libro. Pero ¿dónde están las palabras? Se agotaron los significados. Nos comunicamos como sordomudos con las manos. Querría que me diesen permiso para escribir a un son arpado y agreste la escoria de la palabra. Y prescindir de ser discursivo. Así: polución.
Un soplo de vida, Clarice Lispector
El calor me hace ser un muñeco sin ideas ni palabras.
ResponderEliminarUna cosa tengo clara: adoro a Clarice Lispector. La he leído siempre como si fuera poesía, con ese gozo y esa predisposición.
Qué texto tan fugitivo nos traes Stalker, es como si siguiera una línea pero mutara por los diferentes puntos que la forman dejando de ser lo que era pero manteniendo esa esencia lineal.
ResponderEliminarAsí que adoras a Lispector? yo no sé de qué la tengo en mis recuerdos, pero no cre ahber leído nunc de ella; inexplicable.
Leerla como poesía dices, tendré que probar. Versos sincopados.
Me gusta cuando dice "Vivir es una especie de locura que la muerte comete. Porque en ellos vivimos, vivan los muertos." y "De repente las cosas no tienen por qué tener sentido. Me satisfago en ser. ¿Tú eres? Estoy seguro de que sí. El sinsentido de las cosas me provoca una sonrisa de complacencia. Todo, sin duda, debe de estar siendo lo que es." y..."Hoy es un día de nada. Hoy es hora cero" y "Siempre fui e inmediatamente dejaba de ser."
Podría seguir citando un rato más, realmente tiene muchas cosas que me han gustado mucho... bueno, por último, creo que este trocito ..."Quiero multiplicarme para poder abarcar incluso las áreas desérticas que dan idea de inmovilidad eterna. En la eternidad no existe el tiempo. Noche y día son contrarios porque son el tiempo y el tiempo no se divide. De ahora en adelante el tiempo será siempre actual. Hoy es hoy."
Rejuvenezcamos en cada instante, a pesar de la idea popular de que a cada instante nos hacemos viejos.
esto es pura poesía, sin duda.
ResponderEliminarme ha acaba de clavar un aguijón y el veneno va subiendo, vamos, que después de leer esto me voy a poner a escribir pero ya.
gracias.
"Vivir es una especie de locura que la muerte comete"....
ResponderEliminarSencillamente genial....gracias.
"Redondo sin principio ni fin, soy el punto antes del cero y del punto final. Pero al mismo tiempo todo es tan fugaz. Siempre fui e inmediatamente dejaba de ser. El día transcurre a su aire y hay abismos de silencio en mí." Lispector es única para mostrar otra realidad más interna y mucho más inquieta que la de las cosas que nos sosiegan desde el mundo. Cosas que tienen su encrucijada incluso en las propias palabras: "Pero ¿dónde están las palabras? Se agotaron los significados."
ResponderEliminarElla remonta los antecedentes del texto, sostenida como por garras que penetran las rocas de significantes vacíos, comidos por los gusanos como la pulpa de los frutos, y nos habla en lenguaje violín, persistente y agudo, y sin dejarnos regresar al punto de arranque, porque hoy, ahora, es tan sólo cero.
Gracias por traerla, Stalker. Clarice Lispector me desmonta. Y su peligro es que después de ella no quiero ser rescatada para volverme a montar, ni por mí ni por nadie (suponiendo, claro...). Todo en el texto es impresionante. Una vez más, salgo "tocada" de Stalker-world.
Guauuuuu.
ResponderEliminarUn extraño en mi mismo…el enemigo de la verdad. Olisqueo, busco…
.Salud.Suerte.
El día que me la recomendaron me dijeron que era droga dura...y hasta qué punto lo es¡¡¡. Un saludo.
ResponderEliminarPortinari:
ResponderEliminarLispector puede ser una lectura esencial en tu bagaje personal. Por su capacidad para trazar puentes entre el mundo exterior y el interior y mostrar sus desplazamientos, fisuras y vasos comunicantes.
Abrazos
Raúl:
ResponderEliminarcuando el veneno suba se te alojará un diamante en el alma. Tendrás que desalojarlo con los dientes, y nunca se sabe si las palabras bastan.
Arde en la luz, compañero.
GIO:
ResponderEliminarcómo me alegra que disfrutes con estos textos...
abrazos
Susana:
ResponderEliminardéjate desmontada un rato, que el viento atraviese las piezas. Y luego, si acaso, pide a un niño, o a un animal, que vuelva a montar las piezas, a su aire...
abrazos
Bash:
ResponderEliminaren tu faceta de husmeador-rastreador eres insuperable pero me alegra enseñarte estas cosas. Ya te he hablado antes de Lispector pero la memoria es corta. Espero que esta vez sí me hagas caso...
salud
Bienvenido, Matías:
ResponderEliminardroga dura, bien visto... de hecho, creo que se puede aplicar a buena parte de la poesía que estoy subiendo últimamente. Droga dura, antídoto contra las medias tintas. Aprendizaje de la mirada que requiere el balbuceo como condición previa.
Salve
Clarice, Clarice, evasiva, brutal, indómita, inapresable. Qué línea la tuya, Stalker, "cuando suba su veneno, se te alojará un diamante en el alma que ni con los dientes se podrá arrancar". Y un vidrio roto se te clavará en el corazón y los dientes no podrán con él, porque se deshace al tocarlo aunque siga doliendo. Aprender portugués solo para leerla, sabiendo que en algún punto exacto Clarice se escapa en cualquier idioma. “Nas árvores as frutas eram pretas, doces como mel. Havia no chão carozos secos cheios de circunvoluções, como pequenos cérebros apodrecidos. O banco estava manchado de sucos roxos. Com suavidade intensa rumorejavam as águas. No tronco da árbore pregavam-se as luxuosas patas de uma aranha. A crueza do mundo era tranqüila. O assassinato era profundo. E a morte não era o que pensávamos” (de su cuento "Amor", en Lazos de familia). Clarice-entómologa, sabia y aterrorizada, bella hasta en la desesperación ... Gracias por traerla, Búfalo.
ResponderEliminararde en la luz?
ResponderEliminarpero mira que eres...
Mariel:
ResponderEliminarme encanta lo que dices. Yo leí el primer libro de Clarice en portugués: "A maça no escuro", y ya aquella novela (que no suele considerar entre sus mejores) me deslumbró. Es cierto que Clarice se escapa, que nos habla desde los intersticios. Es una voz menuda, que nos adelgaza y nos acerca al agua, en cierto modo, y ejerce un sutil proceso alquímico en el alma ávida de intemperies....
me alegra compartirla contigo
Abrazos
¿Ves, Raúl, cómo te has quedado con tu parte? Arde, arde, pero despacito, hombre... ;)
ResponderEliminarquerido búfalo, amigos...
ResponderEliminarno sé qué decir. me fijo en el cigarrillo que fumo. debe ser eso escribir, esa consumición. fatal, en muchos casos. asumible. interrogante.
escribir, al cabo, es tranquilo. eso sí, mejor que los textos tengan mecha, como el de clarice.
tengo mucho sueño, apagaré la luz del bolígrafo y mañana me despertará con su alarma de gallo.
llegará un día que habré perdido el bolígrafo para siempre y habrá dos lecturas: que esté vivo o que haya muerto.
muchas gracias,
besos,
òscar.
Buff, menudo fragmento. Cada párrafo, a veces cada frase, da para detenerse durante un tiempo, es un poema y un tratado filosófico.
ResponderEliminarNo me cabe duda de que este verano ha de caer este libro. En la biblioteca he encontrado los cuentos completos, alguna recomendación?
abrazos con aguijón
PD: blogger me pide "ingente", así, sin más.
Topos, topos, toda Clarice es como la luz del bolígrafo polisémico de oscar, pero si me dieran a elegir, me llevaría a la isla la trilogía "Lazos de familia", "Agua viva" y, sobre todo, "La hora de la estrella", Rubén. Besos lispectorianos.
ResponderEliminarBúfalo hermano:
ResponderEliminarno sabes qué decir pero es que no hace falta. Ya te oigo rumiar. Estás en un nivel al que se me veda el acceso, has ultra-pasado lo humano hace largo rato.
Abrazos
Rubén:
ResponderEliminarlos cuentos completos de Lispector son un buen lugar para empezar. Recuerdo uno, en concreto, una especie de fenomenología poética del huevo que algún día traeremos por aquí porque es, sencillamente, impresionante...
Los libros que recomienda Mariel también los recomiendo yo. Añadiría "Un soplo de vida", del que he extraído este fragmento, y, en un nivel de introspección y extrañeza aún mayor, "La manzana en la oscuridad", libro para mí asombroso pero no muy valorado en su producción.
En cambio, recomiendo no empezar por sus primeras novelas (que pueden quedar más adelante) y evitar libros como "La pasión según G.H" o "Aprendizaje o el libro de los placeres", que a mí me engancharon menos.
En definitiva, tienes un amplio campo de tiro, Rubén...
Abrazos
Mariel, esas recomendaciones caen como agua viva sobre el desierto de lo real, nunca mejor dicho. Abrazos de topo...
ResponderEliminarHola:
ResponderEliminarLeí el texto de Clarice cuando lo dejaste pero quería leerlo con más atención. En un primer momento me sacudió y ahora que lo he vuelto a leer otra vez una sacudida.
Luego he leído vuestras intervenciones tan acertadas.
Destaco lo que a mi me a impresionado más:
"Esto no es una lamentación, es el grito de un ave de rapiña".
"Vivir es una especie de locura que la muerte comete". Esto me parece fantastico. A veces real como la vida misma. Puff. que fuerte.
Un beso en la cara muerta. Que fuerte...
"El sinsentido de las cosas me provoca una sonrisa de complaciencia". Así es como deberiamos de tomarnos la vida y todo iría mejor para todos. A veces nos tomamos la vida demasiado en serio y al final la vida no tiene nada de serio.
Por eso me resulta tan fácil reírme de mis torpezas. JAJAJA.
"nos comunicamos como sordomudos con las manos".
Que bueno Stalker no la conocía.
Gracias es genial.
Un abrazo a todos.
Tomo nota. Desde luego este pasaje de "un soplo de vida" no tiene desperdicio, y ya estaba deseando acercarme a Clarice después de vuestras recomendaciones; les meteré mano a los cuentos muy pronto.
ResponderEliminarabrazos
En su día leí este libro como si mi vida dependiese de ese soplo. Creo que de verdad está escrito "como si fuese a salvar la vida de alguien".
ResponderEliminarProbablemente mi propia vida.
Un abrazo, Stalker.
acabo de encargar los cuentos completos a una webshop, con que haya unos cuantos como este el disfrute misterioso estará asegurado.
ResponderEliminarsi antes hubieras colgado esto antes lo hubiera adquirido.
Siento que Clarice sonríe con los ojos húmedos leyendo las palabras de Tera. Stalker, no sé, se me ocurre ahora que los ojos de Clarice se enlazan a los de Idea Vilariño y a los de Bachmann, hay algo que hermana las últimas miradas que colgaste ...
ResponderEliminarLola:
ResponderEliminarel libro "Un soplo de vida" es una rosa de los vientos; disemina sentido y poesía a raudales, no te lo pierdas...
abrazos
Rubén:
ResponderEliminarme alegra que te decidas de una vez, verás como no te arrepientes. Por mi parte, los dos Blanchot van viento en popa, claro que yo soy más rápido en desenfundar y tú eres más bien rumiante (y mejor lector que yo).
Salve, frater
Raúl:
ResponderEliminaren realidad esto no es un cuento; son las dos primeras páginas de la "novela" (por atribuirle una equívoca clasificación genérica, porque Clarice es inclasificable) "Un soplo de vida". Pero los cuentos son maravillosos...
salud
Querida Mariel:
ResponderEliminarqué bueno que hayas observado ese hilo de miradas, que está perfectamente calculado y apuntan a lo que más me interesa en literatura: esa herida, pulso o gesto dolorido, indagador, que se deshace en grito o catarsis.
Son tres miradas poderosas y espero que habrá alguna más.
Abrazos
Con los Blanchot desenfundaste con una velocidad que ni el jinete pálido, me quedé paralizado y recibí la dosis de plomo. ¿Mejor lector que tú? no creo, acaso más lento, pero dudo de que rumie mejor. En cuanto me acabe "Derrumbe" e hurgue un poco en "Las fenicias" de Eurípides, que aún no me la he leído y parece que es canelita (la tragedia antigua con más muertos, jeje), buceo en esos cuentos completos.
ResponderEliminarsalut!
es increible stalker eres inagotable y maravilloso es esta entrada un escrito con el que yo me siento muy identificado! lo he leido mientras oia a bach!genial adolfo
ResponderEliminarPak Karamu reading and visit your blog
ResponderEliminarAdolfo, Bach más Lispector provocan un arrobamiento infalible... qué gran combinación.
ResponderEliminarAbrazos
PakKamaru, te doy la bienvenida a pesar de que has dejado el mismo mensaje a todos los compañeros y escribes en un idioma que, desgraciadamente, no puedo leer (creo que tú tampoco puedes leer el nuestro, pero poco importa).
ResponderEliminarSalud
Salker:
ResponderEliminarTomo nota para pedirme el libro y lo leeré con Bach como dice Adolfo.
Gracias
Un abrazo.
me pierdo unos días y cuando vuelvo me encuentro a clarice lispector. si tuviera que señalar los tres autores que más me han influido en mi vida -no los que más me hayan gustado sino los que más me influyeron- lispector estaría sin dudar entre ellos.
ResponderEliminarlos cuentos son más que recomendables, y de novelas mi favorita es "la manzana en la oscuridad", aunque no hay nada de esta mujer que me haya decepcionado o que yo pensara que no merecía la pena su lectura.
un abrazo.
Ana:
ResponderEliminarme extrañaba mucho que faltaras a la cita con Clarice Lispector. Lo atribuía a tu descanso vacacional...
Los otros dos nombres, ¿son Rilke y Dickinson?
Celebro, además, una cosa muy especial: nunca he encontrado a nadie que diga que le haya gustado "La manzana en la oscuridad". Sabes introducirte en grietas que otros no ven, como ya me has demostrado en innumerables ocasiones.
Un abrazo veraniego, acalorado-admirado.
No la conocía, pero tenía la intención de escribir algun día una cosa muy parecida a esto que acabo de leer. Parece un poco frustrante, es como si no hubiera sido capaz de llegar a esto. Por otro lado, veo que es un camino menos que elegir y, por tanto, seguir buscando otras formas de expresión.
ResponderEliminarQuizá no debiera decir esto hasta conocer mejor la obra de Lispector, pero siempre he pensado que ese tipo de escritura tan à la Beckett, puede ser peligroso: uno nunca sabrá quién pudo tener esa misma idea antes, ni si vale la pena. O peor aún, si sabemos que no estamos dando vueltas en círculo, reescribiendo la misma idea durante años. Pero bueno, en el riesgo está el gusto de este oficio, supongo.
Carlitox:
ResponderEliminarperseguir la originalidad absoluta en la escritura es siempre una quimera. Siempre alguien se habrá adelantado. Hay que conformarse con encontrar un estilo más o menos propio, con eso basta, creo. Lo demás, llegar el primero, no sé, no creo que la literatura sea equiparable a las olimpiadas, no hay marcas que batir ni hay que ser el primero en nada.
Respecto a Lispector, yo sí la conozco bien y no le veo ninguna relación con Beckett. A veces se buscan filiaciones imaginarias para ningunear la escritura de grandes mujeres como Lispector. Ella tiene un estilo propio y reconocible entre miles, y no tiene nada que demostrarle a nadie.
En cuanto a reescribir la misma idea, quizá en el fondo lo hace todo el mundo y las ideas no importan tanto... quizá importan las inflexiones en la tonalidad y no tanto la melodía, que puede ser predecible pero estar enriquecida por una inesperada temperatura anímica.
Tampoco tengo mucha idea, Carlitox, pero no te desanimes a escribir.
Abrazos
Perdona, Stalker. Quise ser tan conciso que al final he dejado atrás demasiados matices. Cuando comparo a Lispector con Beckett (e insisto, no he leído otra cosa que no sea ese texto), es porque ambos pueden recordarme a ese tipo de escritura que se asemeja a una espiral, a un agujero negro que engulle todo.
ResponderEliminarNo quise calificar de nada a Lispector porque no la conozco, sino centrarme en el efecto que me ha dado su lectura. Es una sensación que llevaba buscando bastante tiempo.
Es cierto que esto que llamamos arte no funciona como el deporte, pero se trata de un enorme ejercicio individual en el que hay que elegir bien las influencias. En Francia se impone el neoclacisismo de Stravinsky y salen de debajo de las piedras decenas de compositores "neoclásicos" que no asimilan bien ese estilo. Lo mismo podría aplicarse a lo que sucede actualmente en Rusia: todo suena a Shostakovich o a Schnittke. Ya Debussy contaba que era difícil superar el influjo de Wagner cuando escribía música.
En definitiva, no digo que Lispector se parezca mucho o poco a alguien, sino que posee cosas que yo buscaba escribir o que pueden inspirar otras. De modo que, si bien ciertas ideas que tengo son cada vez menos "originales" por este descubrimiento, sí podría al menos filtrar con su presencia un camino que solo yo debo recorrer.
Es difícil desmenuzar una reflexión tan personal como la de mi anterior comentario, pero créeme que no menospreciaba a esta persona. Al contrario, agradezco muchísimo que des a conocer a tanta gente.
Un abrazo
Carlitox
Ese rostro y esos ojos inolvidables y tan particulares de Clarice Lispector (ese maquillaje años sesenta), tan gemelos de su literatura.
ResponderEliminarSaludo